6 trucos para comer menos que no afectan a la salud

A todo el mundo nos gustaría comer de todo y mantener la línea, pero eso resulta bastante complicado, sobre todo si de vez en cuando nos damos un festín en forma de chocolate o de dulces. Sin embargo, hoy te proponemos 6 trucos para comer menos que no afectan a la salud. Se pueden realizar con facilidad y no resultan nada agresivos. Es cuestión de adaptarse a ellos. Recuerda que para mantener tu peso o perder unos kilos de más no hace falta pasar hambre.

Beber un par de vasos de agua

Antes de cada una de las comidas procura beber un par de vasos de agua. De esta manera tu estómago se llenará antes y no te abalanzarás sobre el plato de comida como si estuvieras muerto de hambre. Es importante que el agua nos sacie y evite ingerir más alimentos de lo normal.

Emplea ropa ajustada

A la hora de sentarnos a la mesa intentaremos vestirnos con prendas ajustadas. No hace falta llevar dos tallas menos de lo que necesitemos, más bien es utilizar chaqueta con los botones cerrados o un pantalón con la cintura ajustada que nos recuerde cuando comamos que queremos mantener la talla. Cuando comiences a comer y la ropa te empiece a apretar te darás cuenta de que no puedes excederte.

Los vegetales, el plato principal

Para saciarte antes y conseguir reducir la cantidad de calorías que consumes, lo mejor es que llenes tu plato de vegetales. En la medida de lo posible hay que intentar que se conviertan en los alimentos principales y que predominen sobre el resto de productos, ya sea pasta, carne o arroz.

El color del plato también influye

Hay una tendencia a comer más cuando existe poco contraste entre el color de la comida y el plato que tenemos delante, según un estudio realizado por la Universidad de Cornell en 2012. Por lo tanto, para comer menos cantidad buscaremos que haya un gran contraste entre la comida y la vajilla. Algo similar ocurre con el tamaño de los platos. Cuanto más pequeños sean, menos cantidad entrará en ellos y menos comeremos.

Los hidratos de carbono como acompañamiento

Al contrario de lo que solemos realizar en nuestras dietas, los hidratos de carbono deben ir de acompañantes y nunca como ingredientes estrella. A la hora de la comida se puede realizar un plato en donde predominen las verduras, un poco de proteína y una ración mínima de arroz integral, mientras que en el desayuno tomaremos un yogur con frutas y le echaremos por encima unos pocos granos de cereales.

El ambiente también influye

Cuando vayamos a comer el ambiente que haya en la cocina o en el comedor también influirá a la hora de comer más o menos. Lo más adecuado es poner música relajante y bajar la intensidad de las luces. De esa manera comeremos más lento y posiblemente menos cantidad. Es preciso que apagues la tele y te olvides del móvil. La clave está en masticar más despacio y que la comida nos dure más tiempo.